martes, 11 de septiembre de 2007

voces emergentes


En esta era de las tecnologías de la información y la comunicación, en que tenemos acceso a un mayor número de datos provenientes de todo el mundo, en tal cantidad que apenas nos percatamos de los sucesos cuando ya son parte de la historia y han sido suplantados por otros más recientes, suge la imperiosa necesidad de buscar espacios donde poder expresar ideas, opiniones, críticas, etc., sobre estos temas y otros que pudieran parecer más triviales y, que sin embargo, forma parte de la vida misma de las personas y de las sociedades.

En la película Crash se menciona una frase que puede resumir esta evolución: "tal pareciera que ahora las personas salen a las calles para sentir el contacto humano". La misma frase es mencionada por Mou, personaje de la serie igualmente aclamada que odiada de Los Simpsons al ser interrogado sobre si sale por su voluntad de cierto lugar o si prefiere ser echado: "Échame, estoy desesperado por un poco de contacto humano". Quizá las referencias no sean de lo más recomendable, pero las ideas expresadas me dan la pauta para describir los efectos de la mencionada evolución.

La comunicación interpersonal está dejando de ser tal para convertirse en una comunicación mediada por el producto de las tecnologías antes descritas. Y más aún, cada vez es más frecuente que, en lugar de expresar lo que en realidad pensamos, empleamos palabras dichas por otros, como ejemplo los famosos fowards; y es que es más fácil tomar lo que ya está dicho y apropiarnoslo para expresar algo, que buscar las palabras para hacerlo.

Pudiera parecer paradógica la justificación de este espacio, puesto que, al mismo tiempo que se proclama la rendición de la capacidad de comunicación humana al influjo de los medios, empleé un medio para expresar mis opiniones al respecto. Mi intención es reflexionar sobre la evolución de este proceso de comunicación que, al igual que otros tantos fenómenos contemporáneos, no se va a detener ni a anular por más voces que se eleven denunciando la despersonalización de los individuos en virtud del empleo de las llamadas TIC's. Creo firmemente que gran parte de la respuesta a este proceso de informatización de las sociedades está en no perder de vista que quienes estamos detrás de los monitores, de los aparatos celulares, de los programas de televisión y radio somos personas y esa es una realidad que no va a cambiar ni se puede detener. Se trata, en cierto sentido, de humanizar a la tecnología antes que ésta tecnifique al hombre.

Voces emergentes quiere ser un espacio donde la persona se exprese como tal, guardando las debidas formas y el respeto entre nosotros, pero que sin miedo, opinemos, reflexionemos, propongamos, etc., sobre los acontecimientos que se desarrollan en este caótico mundo de principios del siglo XXI. Por eso el nombre; en el umbral del siglo, será mucho lo que presenciemos y más lo que tengamos que decir al respecto.

Comencemos a elevar nuestra voz, entonces y volvamos al noble arte de la conversación, aunque mediada, pero siempre viva, siempre nuestra, siempre humana.